El gobernador se reunió con los legisladores del Frente Progresista que asumirán el 10 de diciembre. Fue el segundo encuentro después de las elecciones del 16 de junio.

 

Se discutieron criterios de trabajo parlamentario; y de manera incipiente, la futura conducción de la cámara. Algunos sectores reclamaron mayor participación.

El gobernador ya los había convocado a apenas una semana de las elecciones del 16 de junio, en las que el peronismo se alzaba con el triunfo. Al igual que en aquella ocasión, la invitación de Lifschitz no fue en su carácter de titular del Poder Ejecutivo. Lo hizo, en cambio, como líder de un espacio político que encontrará, precisamente en la Legislatura, su principal campo de acción. Con la asunción de Omar Perotti, el Frente Progresista será oposición y tendrá mayoría automática en la Cámara Baja. Allí apuntó Lifschitz en su breve alocución para dar paso, luego, a otras exposiciones.

Mientras se intercalaban empanadas y algún aperitivo, Lifschitz habló de los criterios de trabajo que tendrá o debería tener el Frente en el parlamento; destacó la fortaleza de contar con mayoría en Diputados y puso énfasis en la representatividad territorial que allí confluye.

Entre los presentes, estuvieron Fabián Palo Oliver, Gabriel Real, Maximiliano Pullaro, Joaquín Blanco y Pablo Farías.