En la madrugada del pasado lunes, con la última agrupación que desfiló, en este caso la prestigiosa Mangueira, se dio por cerrada la edición 2020 de los Carnavales Sunchalenses.

Una vez más el corsódromo albergó el esfuerzo, el trabajo, la indeclinable dedicación que cada una de las agrupaciones le ponen a lo largo del año a esta realización con el único fin de volcar, en el carnaval una pasión que los moviliza y por la que no escatiman sacrificios para que, en cada ocasión se presente una oferta superadora, con un show muy cuidado y que es capaz de capturar la atención de un público expectante que no escatima elogios y cada pasada es premiada con cálidos aplausos.

La concurrencia de público no fue la aguardada, reflejando la comunión con una fiesta que ya es centenaria en la ciudad  y que indudablemente es símbolo de la expresión local.