A muy pocas cuadras de la Casa de Gobierno, vecinos de un edificio de calle San Martín denuncian que dos inquilinos ocasionan problemas en el lugar.

Una madre y su hijo de unos 40 años, que alquilan un departamento en el noveno piso, aterrorizan a los habitantes. Generan destrozos, insultan y amenazan a sus vecinos. Pero también atacan a comerciantes de la zona y peatones.

Denuncias

Lo que advierten los vecinos es que estas dos personas gritan dentro y fuera de su casa, insultan, golpean y rompen las puertas de los departamentos y los ingresos. Pero las reacciones no terminan ahí: desde patear autos estacionados hasta lavar con litros de lavandina los espacios comunes. Las agresiones no cesan.

Uno de los últimos episodios fue una amenaza escrita en el espejo del ascensor que expresa: "Acá se mata de a poco".

Los dueños del departamento alquilado manifiestan no saber qué hacer con los inquilinos. Los vecinos buscan que los medios repliquen la noticia así poder encontrarle una solución a la caótica convivencia.