A las 3 y media de la madrugada de este domingo, la policía tomó conocimiento de una fiesta clandestina y actuó para desarticularla. Del procedimiento también participaron inspectores de la Municipalidad de Avellaneda.
En el lugar había más de 30 automóviles y unas 20 motocicletas. El sereno de la finca fue quien advirtió que rompieron el tejido perimetral para huir ante la llegada de las autoridades.
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De la organización se hicieron cargo Leonardo Picech, 18; Yoel David Villán, 20; y Gonzalo Picech, 22, quienes -arrestados por unas horas- quedaron a disposición del fiscal de turno, Dr. Leandro Mai. Dispuso que se cancele el evento y a los organizadores se le formará causa penal por daños. También por violar los artículos 205 y 239 del Código Penal.
Por su parte, la Municipalidad de Avellaneda labró acta de infracción por violación a la ordenanza que sanciona especialmente y con mayor rigor por la pandemia, las reuniones no habilitadas. Quien firmó el acta municipal es Gonzalo Picech.