La tan ansiada obra de la autopista Rufino-Rosario tiene más complicaciones de las previstas para esta altura del año, y ya que ni por asomo se están cumpliendo los plazos estipulados para su comienzo. La picardía popular hizo que un cartel oficial que anuncia la obra apareciera con una leyenda escrita a mano que dice "menos carteles y más autopista", lo que indica el malestar en la población general por la demora.
Para el presidente de la Comisión Autopista, Ovidio Butani, está todo listo para empezar, aunque hay un detalle: "Sólo falta la plata". Y ese es el problema, el dinero que no aparece, mientras que nada indica vaya a aparecer en el corto plazo para dar inicio a la ansiada obra.
El obrador del corredor Panamericano II, ubicado sobre la ruta 8, se instaló para ser la base de la construcción de los primeros 18 kilómetros de autopista Rufino/Rosario pero en ese lugar no hay movimientos que puedan presagiar el inminente comienzo de la obra. "No hay ni una bolsa de cemento, sólo se ven cuatro operarios realizando tareas menores. Esto es un desierto", dijo una fuente que visitó el lugar anteayer.