“Las obras de vivienda que hace la provincia son la única opción para que una familia llegue a tener una casa propia”, dijo el titular de la Secretaría de Hábitat y Urbanismo, Diego Leone, quien evaluó cómo se encuentra el nivel de demanda habitacional en Santa Fe y repasó los logros y dificultades que debió afrontar durante su gestión que culmina el 9 de diciembre. Para el funcionario, los inconvenientes que le toca atravesar a un trabajador, con sueldo medio, que padece los vaivenes de la economía nacional y la constante pérdida de valor adquisitivo, cerraron el abanico de opciones a la hora de resolver el acceso a la casa propia.
“Actualmente la situación económica es muy compleja y, por esa razón, la vivienda que nosotros construimos se transformó en la única alternativa que una familia de trabajadores tiene a la hora de resolver donde vivir”, remarcó y aseguró que las otras opciones, como el crédito Procrear o un UVA, “resultan inalcanzables en la actualidad. Una familia no puede de ninguna manera pagar una cuota alta”.
Esto hace que el programa provincial sea una posibilidad casi excluyente a la hora de concretar el sueño de tener su propia vivienda. “Hoy trabajamos en 280 localidades donde tenemos 3.500 viviendas en ejecución, a lo que se suman las tareas de mejoramientos barriales”, contó Leone y precisó que “desarrollamos una gestión territorial abarcativa directamente relacionada con las necesidades que había en la provincia. Esto fue posible gracias a lo que nos marcaba el registro digital de cada localidad, sin discriminar políticamente a ningún jefe comunal”.