Alejandro Gómez participó en el país asiático de un certamen que nuclea a los mejores colocadores de cerámicos. Fue sub campeón y cuenta la experiencia.
Alejandro Gómez es albañil. Trabaja hace más de 35 años en el rubro y, según cuentan sus compañeros, colocando cerámicas “es Messi”, el mejor de todos. No solo eso, es también el más rápido y, mientras trabaja, todos los otros miran y aprenden. Tal es así que su excelente destreza hizo que participe de un Mundial de Colocación de Cerámicas en China y salió subcampeón.
Su vida
Hijo de una ama de casa y un padre verdulero, Gómez incursionó en el mundo de las mezclas, cementos, arena y ladrillos gracias a su tío con el cual aún cuando se cruzan en alguna obra trabajan juntos.
Con 15 años, le pidió al hermano de su padre que le enseñe el oficio y de esa manera salió a buscar el mango para llevarlo dignamente a su casa.
Así fue que arrancó con lo básico, fue aprendiendo de a poco y tras pasar algunos años llegó el momento que iba a cambiar su vida. Su tío le dijo que era hora de arrancar con las cerámicas. Es bueno aclarar que dentro del oficio es uno de los puntos más difíciles.
El trabajo
Como no es "soplar y hacer botellas", tampoco es cortar y pegar cerámicos. Son muchas las cuestiones que hay que tener en cuenta. Tienen que estar “a plomo” bien cortadas, sin cacharse, seguir dibujos y estar bien colocadas. Las juntas son otro tema. Deben estar parejas, uniformes y a la misma altura.
Alejandro comenzó guiado por su tío a colocar por primera vez unas cerámicas en un baño. Lo hacía como si nada. Cómo si lo hubiera hecho toda la vida. En ese momento todos se dieron cuenta que había algo innato y que era bueno de verdad.
Tal fue así que hoy es una figurita difícil dentro de las constructoras. Es uno de los más buscados y todos quieren tenerlo en sus filas.
El viaje a China
Pero tanto talento no podía quedar en nada. Hace unos meses, Alberto se enteró que en China se iba a realizar el sexto mundial de colocación de cerámicas. Al principio Gómez se entusiasmó pero luego vio que el viaje era económicamente inviable. Por suerte, luego lo invitaron a participar y el santafesino fue enviado para dejar a la provincia y la ciudad en lo más alto. La mezcla más linda empezaba a prepararse.
Fue, conoció China, participó del sexto mundial y se quedó con el segundo puesto. En el certamen participaron 21 chinos, y otros albañiles de Marruecos, España y Australia.
En diálogo con El Cuarto Poder, Alejandro Gómez, explicó que en 2018 lo invitaron al concurso a nivel nacional para ver quién es el mejor colocador de cerámicas.
“Gané en la provincia y después hubo una final en Buenos Aires de 18 concursantes, uno por provincia. También gané. Pensé que la cosa terminaba ahí pero en febrero de este año me dicen si quiero participar del Mundial en China. Yo no entendía nada. Igual lo veía imposible. Pero le dije que sí. En agosto me avisan que prepare el pasaporte porque iba a representar a la Argentina. Para mí era un sueño”.
Teórico y práctico
Según relató el concursante en la parte teórica hubo 100 preguntas con formato multiple choice y Gómez sólo erró dos. Luego, todo se basó en la parte práctica.
“En la competencia te da una pared de ciertas dimensiones y te dan varios metros cuadrados con un dibujo mezclado. Ahí lo tenés que armar en dos horas y un jurado de 15 personas analizaba si estaban bien pegados, si estaban bien hechas las juntas, la prolijidad y la limpieza de la zona, y las herramientas”.
“No hay grandes secretos y como todo trabajo si se hace con amor y responsabilidad hay buenos resultados”, dijo Alejandro sobre su capacidad y por qué es el mejor en el rubro de la colocación de cerámicos.
