El cuerpo de Silvia Pereyra fue hallado por su hija, quien fue a verla porque no podía comunicarse con ella.

Silvia Pereyra, de 59 años, murió este sábado en su casa de Chacabuco, provincia de Buenos Aires. Su hija la encontró muerta en el piso de su hogar con señales de haber sido apuñalada al menos tres veces.

Pereyra trabajaba como peluquera en su casa,en la calle Roca entre Padre Doglia y Avellaneda. Allí la encontró muerta su hija este sábado a las 11, cuando fue a verla porque no podía comunicarse con ella.

El cuerpo de Pereyra exhibe a simple vista tres heridas, una en la espalda y dos cerca del corazón. Podrían ser heridas de un cuchillo o un vidrio.

El caso lo investiga personal de la Ayudantía Fiscal de Chacabuco, que depende del Departamento Judicial de Junín. Aún no se descartó la hipótesis de un femicidio.