En 2019, dos torres ubicadas en Maipú 1023 de la ciudad de Rosario fueron adjudicadas a 42 familias que al día de hoy no pudieron mudarse.
Aunque prometió terminar esta obra crucial en dos semanas, la Empresa Provincial de la Energía (EPE) aún no cumplió e imposibilita que decenas de personas puedan habitar las edificaciones.
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Las familias denunciaron que los inmuebles están terminados pero falta la instalación de un transformador que debería colocar la empresa santafesina.
Algunos propietarios ya cancelaron altos porcentajes o la totalidad del valor de los departamentos, pero la mayoría debe hacer frente a elevados alquileres y cuota del fideicomiso.
Con un contexto económico complicado que torna aun más difícil el acceso a la vivienda propia, las 42 familias integradas por personas de clase media trabajadora atraviesan momentos de angustia y tristeza por la demora que no les permite mudarse.
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“Mi pareja y yo ya adelantamos el pago del 80 por ciento de un departamento de 3 dormitorios, por el cual pagamos cuotas de 10.000 pesos. Pero a eso se suma el alquiler de entre 25.000 y 30.000 pesos del lugar donde vivimos. Entre nosotros hay muchas familias con hijos, con gastos, que también pagan alquileres más elevados”, comentó Elías, de 37 años.
“Tengo una familia numerosa, los departamentos están terminados y no nos podemos mudar desde más de dos años. La mayoría paga alquileres que cada vez son más elevados y puso mucho en esto”, manifestó otro de los damnificados.
