Esta institución que está sostenida por el Estado local, se ubica en instalaciones del ITEC, en el Parque de Actividades Económicas de Rafaela. Además, está integrada por un equipo interdisciplinario de profesores, tutores, psicólogos y asistentes sociales que trabajan en el abordaje de cada realidad en particular y respetan el tiempo de cada joven en la incorporación de los contenidos y prácticas.
Desde el año 2012 hasta la fecha, pasaron por el Centro 427 chicos y chicas que aprendieron soldadura, carpintería, electricidad y tornería. En este caso, el oficio se convierte en una herramienta que les permite resignificar su vida y a partir de ahí, empezar a transformarla.
Por eso, no se trata solo de un lugar de contención sino también un nuevo comienzo que le posibilita al joven redescubrirse desde una nueva perspectiva que lo motiva a soñar y construir un proyecto de vida, considerando a la educación como una herramienta indispensable para disminuir las desigualdades sociales en el acceso al mundo del trabajo.
Este proceso tiene una duración de dos años iniciales, donde en un primer período los estudiantes adquieren nociones básicas de los talleres y, en un segundo ciclo, eligen profundizar su formación y especializarse en el oficio que deseen.