La empresa BLD, corredora granaria, bursátil y de servicios que entró en suspensión de pagos por casi u$s 100 millones de dólares con sus clientes del segmento agrícola, decidió ayer girar su operatoria financiera a agencias de Bolsa de Buenos Aires. Al mismo tiempo, presentó a los acreedores perjudicados, entre los que sobresalen los productores, un plan de rescate que consiste en convertirlos en socios de la compañía a través de la suscripción de acciones preferidas.
La incertidumbre que generó la situación de BLD se trasladó desde el mercado granario al bursátil, lo que obligó a la compañía a girar los fondos de sus clientes a la corredora Allaria, con sede en Buenos Aires. Serían unas dos mil cuentas por un monto de 3.400 millones de pesos.
Además, la compañía maneja unas 3.000 cuentas de clientes agropecuarios. Buena parte por operaciones correspondientes a la polémica modalidad de correacopio, por la cual varias corredoras pasaron de ser simples intermediarios a comprar y vender mercadería. Y a arbitrar el negocio con instrumentos financieros, como bonos o letras, para sacar más rentabilidad.