En el marco de la conmemoración del 165° aniversario de la Policía de Santa Fe, el ministro de Seguridad de la provincia, Marcelo Sain, se negó a dar declaraciones por la renuncia del hasta hoy jefe de la institución, Víctor Sarnaglia, tras alegar que ello había quedado en el pasado y prefería no hablar del alejamiento, pese a que la dimisión se daba casi en simultáneo a sus palabras.
La salida de Sarnaglia puso fin a un dilatado conflicto que mantenían con Sain prácticamente desde el mismo día que asumieron. De hecho, la relación entre el ministro y el ex jefe de la policía comenzó a tensarse a partir de la aparición de una nota en medio de la investigación que llevó al banquillo al exfiscal regional Patricio Serjal y al fiscal Gustavo Ponce Asahad por cohecho y el incumplimiento de los deberes de funcionarios públicos.
Saín fue contundente ante la consulta respecto de la renuncia de Sarnagia: “Es el pasado y yo no voy a hablar de eso”, sentenció. El ministro decidió girar la discusión entorno a la situación actual de la policía de la provincia, la cual se encuentran en una gran“precaridad laboral", reflejada en el caso de Franco Rolón, el policía remisero que asesinó a dos ladrones tras resistirse a un asalto.
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"Un chiquito que trabaja a 170 kilómetros, donde hace servicios adicionales y en el horario en el que tiene que dedicarse al ocio, al descanso y a la vida familiar, estaba trabajando de remisero, eso es lo primero que quiero destacar”.
En consecuencia, remarcó la necesidad de dar tratamiento al proyecto de seguridad pública remitido a la legislatura, que establecería un nuevo régimen salarial, focalizado en tanto en el desempeño como en la responsabilidad de los agentes.
"Queremos convocar a los representantes de los policías a una mesa para discutir estas cosas, como el sistema de protección, su carga laboral y el salario, entre otros. Estamos proponiendo un nuevo régimen salarial, pero al mismo tiempo no vamos a convalidar nunca una acción delictiva cometida por un funcionario estatal que trabaja de policía", explicó al móvil de Mañana OH!.
Justicia
Por otro lado, Sain valoró los trabajos de los fiscales del Ministerio Público de la Acusación (MPA) de Rosario, a cargo de investigar una red de lavado de dinero vinculado al juego clandestino, la cual se encamina con "mucha profundidad".
“Estamos absolutamente comprometidos con la labor de los fiscales que no tienen ningún tipo de miramientos a la hora de ir contra todo lo que tiene que ver protección estatal al mundo criminal complejo como el que estamos observando. Esa investigación recién empieza y está continuando con mucha profundidad. En el marco de esa investigación se va a dar cuenta de muchas actividades y sectores que han protegido esa red de criminales complejas de alta rentabilidad, entre ellas, sectores policiales”, comentó Sain.
Respecto al caso Oldani, el ministro señaló que, desde que la Justicia Federal se hizo de las evidencias que había recolectado la Justicia Provincial, la causa avanzó y derivó en un informe por parte del fiscal Walter Rodríguez "que dio cuenta de algunos hechos, denuncias por encubrimiento a la fiscal Ferraro, pero también de la intermediación financiera como delito federal y de la eventual participación de algún sector policial del a Unidad Regional I, así que veremos cómo continúa la investigación”, finalizó.
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