En medio de aplausos y aliento, el cardiólogo Sergio Peter, oriundo de la ciudad de Ceres, recibió, el viernes por la noche, el alta médica luego de superar el COVID-19 en las salas de internación del hospital Cullen.
Peter permanecía en el nosocomio desde el 23 de junio tras ser derivado de su ciudad, al poseer una enfermedad preexistente que agravó su situación. Catorce días después, logró superar el virus y convertirse en la segunda persona recuperada bajo transfusión de plasma.
Sus primeros síntomas fueron fiebre y decaimiento. Si bien desconocía haber mantenido contacto con alguna persona infectada de coronavirus, dado su profesión, decidió realizarse un hisopado que corroboró la portación de la enfermedad unas 48 horas después.
Al ser paciente diabético, su cuadro desmejoró, por lo que fue derivado al hospital Cullen para un mayor control. Allí, recibió la donación de plasma, cuyos resultados comenzaron a sentirse al poco tiempo: “Luego de 12 horas del tratamiento con plasma, dejé de hacer fiebre, lo que reveló una mejoría clínica”, narró el cardiólogo al programa Mañana OH! que conduce Marcelo Garrido.
En efecto, el plasma de antiguos pacientes permitió brindarle anticuerpos a modo de defensas, que posibilitó neutralizar al virus. De esta forma se evitó que enfermedad progresase a una fase más grave.
El ceresino se convirtió en el segundo recuperado con este modo de tratamiento, que aún permanece en estudio, pero de comprobarse su efectividad, habría una disminución de las ocupaciones hospitalarias y se evitaría el colapso del sistema de salud.
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