El mismo contempla la disminución de la cantidad de mesas disponibles para su uso garantizando el espacio que evite el contacto entre cada uno de los ocupantes y no más de tres personas por mesa individual.
No se permitirán los grupos numerosos de clientes y tendrán disponibles un vertedor de alcohol en gel en la mayoría de las mesas.
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La medida contempla otras medidas de trabajo compartido y consensuado con las autoridades para garantizar la posibilidad de apertura para escasa cantidad de público y con restricciones pero a la vez permitiendo la posibilidad de generar algún mínimo dinero para los titulares de esos comercios.
La medida se instrumentará desde este jueves y busca lograr coincidencias entre las disposiciones locales y nacionales donde están permitido este tipo de apertura comercial con restricciones.
Recordemos que tras nuevas medidas de restricción impuestas por la intendenta municipal los bares y comedores locales fueron obligados al cierre de sus puertas, cuestión que produjo planteos y gestiones por sus titulares para lograr morigerar la medida.