En primer lugar, dijo que "se trata de acercar a las partes". Se cita a la víctima y se le consulta sobre el hecho denunciado y acerca de cómo sigue la situación y demás. Después, citamos al victimario y conversamos sobre lo sucedido".
En este sentido, aseguró que intentan "que haya diálogo, ver la razón por el cual se originó el conflicto y solucionarlo. Si se llega a un acuerdo, las partes firman un documento por escrito en donde asumen sus compromisos”.
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Según la mediadora, “hay situaciones en las que se necesita hacer un seguimiento, por lo que realizamos llamadas telefónicas o les decimos a la víctimas que se acerquen a la Fiscalía por cualquier cuestión”.
“Se busca darle aire a los fiscales, quienes quizás necesitan ocuparse y dedicarse con mayor tiempo a delitos más graves”, aseveró Sosa y precisó: “los delitos que llegan a mi oficina se refieren a amenazas, lesiones leves dolosas, impedimentos de contacto, usurpaciones”, entre otros.
Rocio Sosa, mediadora del (MPA) de Reconquista