El Concejo reavivó la discusión por la propuesta de aumentar hasta un 50 por ciento la Tasa General de Inmuebles (TGI) a las viviendas desocupadas en Rosario con el objetivo de que haya más unidades para alquilar en la ciudad, en la que se discute si hay entre 15 mil y 80 mil ociosas.
Actualmente, se barajan tres proyectos para su debate, los cuales plantean la necesidad de elevar la TGI entre 25 y 50 por ciento de aquellas viviendas que se encuentren deshabitadas por 6 o 12 meses, según el caso, y asignar esa sobretasa a diferentes usos dentro de la temática tierra y vivienda.
“Ante toda situación crítica, en lugar de pensar en exenciones aunque sea temporarias, lo único que se les ocurre es ponerse a aumentar impuestos. La ley de alquileres terminó complicando el mercado inmobiliario. Todos los días recibimos la queja de familias que dicen que les dificultó el acceso al alquiler, porque los dueños, ante estos proyectos, suben la guardia y ponen las propiedades en venta”, apuntó el concejal Carlos Cardozo.
“Hay antecedentes a nivel mundial respecto de desalentar que las viviendas no estén ocupadas. Se supone que uno construye pensando en la gente, no en la especulación. Algo llama la atención en Rosario, que luego del boom de la construcción de 2008 tenemos ese número alarmante. La vivienda ociosa es un problema urbano que el Estado debe combatir”, analizó por su parte la edil Fernanda Gigliani.
Asimismo, Eduardo Toniolli, uno de los autores de los proyectos en danza, dijo que su iniciativa “intenta brindar la manera que haya más viviendas para alquilar en Rosario a partir de una sobretasa en la TGI para inmuebles ociosos. Y remarcó, que “para ello tomó en cuenta antecedentes internacionales, como por ejemplo, en Francia e Inglaterra, países capitalistas”.
En la ciudad hay unas 60 mil viviendas para alquilar y que no están en el mercado "con fines especulativos". Desde el Consejo Asesor de la Vivienda Única de Rosario celebraron que el Concejo esté dando "esta discusión para gravar a los inmuebles ociosos cobrándole en algunos casos el doble en concepto de TGI a fin de generar una presión fiscal que permita que estos inmuebles que hoy no están dentro del mercado inmobiliario para alquiler -la compra-venta viene desde hace cinco años en franca caída-, y que son fruto de la especulación inmobiliaria, se vuelquen al mercado y puedan amesetarse los precios y multiplicar la oferta", dijo Ariel D'Orazio referente del sector.