El próximo lunes se conocerá el veredicto del juicio que se lleva adelante en los tribunales de Vera, contra el ya condenado ex empleado judicial Manuel Díaz y su hermana la docente Liliana Díaz, en el marco del delito contra la libertad, sustracción, retención y ocultamiento de una persona.
El tribunal está compuesto por la Dra. Norma Noemí Senn, Dr. Santiago Roberto Banegas y la Dra. Claudia Graciela Bressán. El fiscal regional Dr. Rubén Martínez adelantó que solicitó una condena de 15 años más de prisión para Manuel Díaz y 12 años para su hermana.
En el mes de septiembre del año 2015, Juana Margarita Zárate (fallecida) y Liliana Díaz, madre y hermana de Manuel Alcides Díaz, respectivamente, habían sido imputadas por los delitos de amenazas coactivas y de sustracción, retención u ocultamiento de una persona con el fin de obligarla a hacer algo contra su voluntad; triplemente agravado, en concurso real, todo ello agravado por la intervención de una menor de 18 años.
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Las imputaciones a las dos mujeres se produjeron a raíz de lo ocurrido en la alcaidía de la ciudad de Vera, oportunidad en la que la hija de Díaz fue obligada a ingresar a la celda en la que estaba alojado su padre, quien la intentó convencer para que cambiara su declaración judicial en la que lo sindicaba como autor de reiterados y sucesivos abusos sexuales desde que tenía cinco años.
El Tribunal Pluripersonal de Apelaciones de Vera, integrado por los jueces Bruno Netri, Fernando Gentile Bersano y Sebastian Creus, había resuelto elevar la condena de primera instancia de Manuel Alcidez Díaz a la pena de 24 años de prisión efectiva, por los reiterados hechos de abuso sexual cometidos contra su hija de 15 años.
Fallo escandaloso
El tribunal Pluripersonal integrado por los doctores Mauricio Martelossi, Claudia Bressán y Leandro Ruiz Díaz, habían decidido condenar en abril del año 2018 a Manuel Alcides Díaz, a la pena de 15 años de prisión efectiva; una sentencia de gran relevancia por tratarse de un empleado del propio Poder Judicial.
La decisión del tribunal de primera instancia fue recibida con cierta reserva por parte de la abogada Agustina Peralta, integrante del Centro de Asistencia Judicial (CAJ) de Vera y representante legal de la víctima a lo largo de todo el proceso penal.
La disconformidad parcial de la abogada del CAJ, de la víctima y de sus familiares se relacionaba con el hecho de que Díaz había sido absuelto por uno de los hechos denunciados, razón por la cual la sanción penal no había resultado tan elevada como se esperaba.
En este marco, el CAJ decidió interponer el correspondiente recurso de apelación y logró, luego de que se tramitase dicha instancia, que Díaz sea condenado por todos los delitos por los que había sido acusado y, por consiguiente, resultó agravada considerablemente su condena.