La Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) realizó diez allanamientos en Rosario el pasado sábado, en los que detuvo a nueve integrantes de un clan sospechado por la venta de droga en los barrios Rucci, La Cerámica y en la Zona Cero. En los operativos se secuestraron dosis de cocaína, marihuana, armas de fuego, dinero y un chaleco balístico.
En el transcurso de la investigación –en la que intervinieron el Juzgado Federal N° 4 y la Fiscalía 3–, que comenzó hace 11 meses a raíz de una denuncia anónima, se comprobó la existencia de un clan familiar liderado por una mujer que, junto a su pareja y al hijo de éste, abastecía puntos de venta de droga en el noroeste de Rosario. Para ello empleaba una red de colaboradores, quienes también fueron identificados.
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Durante las tareas de inteligencia criminal, los investigadores detectaron que debido a disputas territoriales que incluyeron balaceras ocurridas en cercanías de la calle Blomberg, la banda mudó su centro de operaciones a la zona sudoeste de Rosario, y en una propiedad ubicada por Avellaneda almacenaba la droga. Asimismo, abrió un kiosco-almacén en el barrio Matheu. Pese a la nueva actividad comercial legal, siguió controlando los puntos de venta en zona norte.
El jefe de la PSA José Glinski sostuvo que “se trata de una típica red criminal compuesta por familiares, dedicada al estiramiento, adulteración y fraccionamiento de drogas para la venta a pequeña escala, que se da en zonas de marginalidad urbana”. También destacó que “la presencia de armas de fuego y chaleco antibalas demuestra el nivel de violencia que hay en estos mercados ilegales porque hay una segmentación de la oferta y una competencia cuya regulación se da de manera violenta; una de las particularidades que tiene Rosario”.
Lo que encontraron
Como resultado de los procedimientos, detuvieron a tres mujeres y seis varones, e incautaron 21 gramos de clorhidrato de cocaína fraccionados en 40 dosis; 677 gramos de marihuana repartidos en 203 dosis y dos bultos; semillas de cannabis; dos balanzas de precisión; elementos de corte; un chaleco balístico; tres pistolas; un revólver; cuatro cargadores y 68 municiones de distinto calibre. También secuestraron 118.000 pesos; dos motos; 18 teléfonos celulares; 13 chips telefónicos; una notebook; un pendrive y documentación de interés para la causa.