Justamente la falta de refuerzos es algo que golpea severamente por estas horas al club de Boedo, y que se agudizó cuando el recién ascendido Barracas Central le "sopló" en las últimas horas al delantero de Arsenal, de Sarandí, el paraguayo Cristian Colmán, al que le realizó una oferta económica superior a la que le efectuaron los dirigentes sanlorencistas.

Ante el reclamo de Insúa a Caruzzo por este y otros casos similares fue que el manager anunció su deseo de dejar el cargo al que llegó hace escasos dos meses, aunque desde la Comisión Directiva intentarán disuadirlo para que continúe en funciones, según anticiparon fuentes sanlorencistas.

Y siguiendo con la saga de una jornada agitada, durante el entrenamiento con vistas al partido del sábado a las 15.30 ante Boca Juniors hoy Insúa colocó entre los suplentes al justamente exjugador "xeneize", el enganche cordobés Gonzalo Maroni, de 23 años, cuando ayer lo había ubicado entre los titulares, y él futbolista le pidió explicaciones al respecto.

La respuesta del "Gallego" fue que no lo veía bien y le agregó que además él no lo había pedido, cuando en realidad justamente si algo no le sobran a San Lorenzo son refuerzos, y menos de las características creativas del exjugador de Instituto, el mencionado Boca, Talleres también de su provincia natal, Sampdoria, de Italia y Atlas de México.

Justamente San Lorenzo había querido traerlo hace 8 años, cuando todavía no había debutado en la primera división de Instituto, pero la parábola se cerró ahora con esta llegada desde el fútbol mexicano, pero parece que justo en este momento un referente de las últimas décadas del "Ciclón" no lo quiere.