El presidente Javier Milei supervisó junto a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, el primer operativo antipiquete que implementó el Gobierno para tratar de garantizar la circulación del tránsito, en medio de una protesta que se dirigía a Plaza de Mayo.
El mandatario nacional se retiró pasadas las 15:30 de la Casa Rosada y se dirigió junto a la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, al Centro de Operaciones de la Policía Federal Argentina, donde ya lo estaba esperando la funcionaria.
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Acompañados también por algunos integrantes de la cúpula de esa fuerza, el jefe de Estado, su hermana y su ministra miraban atentamente las cámaras de vigilancia que transmiten en vivo el recorrido de las organizaciones sociales y de izquierda que encabezaban la marcha.
Mientras tanto, algunos de los manifestantes ya estaban llegando a la Plaza de Mayo, que fue el punto de concentración anunciado por quienes convocaron la movilización, en medio de algunos disturbios con los efectivos de seguridad que estaban custodiando la zona.
El conflicto comenzó cuando varias personas intentaron romper el cordón policial y pasar de la vereda a la avenida Diagonal Sur para continuar su camino por ahí, lo cual fue impedido por las autoridades, siguiendo con el protocolo que ordenó Bullrich, lo que motivó algunos forcejeos entre ambos sectores.