Un puñado de radicales, junto a funcionarios socialistas y el próximo intendente de la ciudad de Rosario, Pablo Javkin, se reunirán esta tarde para confeccionar un operativo desarme ante la intención del justicialismo de reformar la Constitución de la Provincia de Santa Fe.
En los últimos días, el peronismo parece haber conseguido el número necesario para que, a través de sesiones extraordinarias, se debata la ley de reforma del Estado previo al traspaso de mandos. En el día de hoy, los legisladores actuales del socialismo, realizarán un comunicado en el cual se desglosará la necesidad de posponer la reforma y el debate constitucionalista, a pesar de haber sido un viejo anhelo en sus años de gestión.
Durante el fin de semana, se realizó una cumbre en la que participaron el ex gobernador Antonio Bonfatti, el actual mandatario del ejecutivo, Miguel Lifschitz y los legisladores Julian Galdeano y Carlos Fascendini. Al parecer, el encuentro estuvo marcado por tensiones y reproches. El titular de la UCR, Julian Galdeano, habría sido el epicentro de todas las miradas, siendo tildado de traidor, al mostrar su apoyo al tratamiento de la reforma constitucional.
En la reunión que se mantendrá esta tarde a partir de las 19 horas, el núcleo socialista intentará frenar la intención peronista de reanimar el proyecto de ley reformista, durante años postergados, a pesar de que los 33 legislativos para dar ruedo a la medida parecería un número puesto.
Mientras el interbloque justicialista busca acelerar las negociaciones y abrir el diálogo político para reformar la Constitución de Santa Fe, el oficialismo pretende poner paños fríos argumentando que, si bien el partido siempre ha sido reformista, ahora, paradójicamente, no sería el momento.
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