Días atrás en las redes sociales se armó una polémica con la fiesta de los alumnos del IPEI. En un momento de la recepción el DJ pasó la canción de Los Palmeras (identificado con Colón) como tantos otros temas aunque el debate y los cruces de palabras se armaron luego de la fiesta.
(De la redacción de Sin Mordaza) Una de las que tomó la palabra fue la hincha y socia María Salzman. Cuatro días después, aclaró lo sucedido y porque escribió lo que escribió.
La socia de Unión utilizó las redes sociales y emitió un comunicado aclarando lo que pasó: Habiendo pasado ya 4 días de mi publicación en Facebook, en mi cuenta personal, ante lo que fue un momento de bronca al ver que entre alumnos que se suponen hinchas de mi amado Club Atlético Unión cantaban cantitos sabaleros; consideré escribir estas líneas para hacerle llegar a ustedes mis más sinceras disculpas si siendo hincha del clásico rival se sintieron agraviados u ofendidos en lo que para mí no pasaba más que un pedido de sentido de pertenencia al alumnado.
Nunca estuvo en mí, pensar que se podría generar una caza de brujas contra docentes, personal o alumnos. Estoy muy lejos de querer algo así, tengo amigos y familiares que son hinchas y nunca pasó más que el folklore de la chicana y la gastada. Lamentablemente, no todos lo ven de esa manera, pero no puedo hacerme responsable por la reacción de los demás.
Mi reclamo en general, no iba dirigido a los hinchas de Colón, sino a que es de conocimiento de todos los Tatengues, lo mucho que cuesta que los socios de Unión logren conseguir un cupo para poder inscribir a sus hijos. Lo cual sí me gustaría que se aplique algún tipo de filtro a futuro para darle prioridad a los socios Tatengues. No se trata de discriminación, ni mucho menos de ser “clasista “como llegaron a llamarme, sino que es una cuestión de prioridad que el socio de Unión hoy no ve.
Pido disculpas por el vocabulario empleado en mi publicación, y también a los Tatengues que hacen escraches o amenazas, les pido que dejen de hacerlo, que todos tenemos un momento de calentura y no medimos las consecuencias de nuestro accionar (yo lo tuve el domingo), pero no sigamos echándole nafta al fuego de la intolerancia. También a los hinchas del clásico rival que no dejan de enviarme mensajes por Messenger insultando. En ese pedido también incluyo a periodistas (No todos), que llevan una semana hablando horas y horas por una publicación de Facebook de un simple ciudadano, pero no le dieron la misma importancia cuando se denunció persecución laboral, aprietes e intimidación dentro del IPEI hacia el personal del mismo. Es necesario bajar un poco los decibeles, no seguir incitando a la violencia.
Solicito a las distintas agrupaciones y al oficialismo, que traten de consensuar un plan de
trabajo donde se priorice al socio Tatengue en las inscripciones al IPEI, y los cupos que queden libres, puedan ser utilizados de la manera que crean conveniente.
Desde ya, sin más nada que agregar
Los saludo Atte.
María Salzman
