Aprehendieron a tres jóvenes en el marco de la investigación del asesinato del pastor evangélico y ex concejal Eduardo Trasante. El hombre fue ejecutado la tarde del martes pasado por dos hombres que ingresaron a su casa en Rosario y le dispararon a la cabeza. Hasta este domingo, los tres sospechosos no estaban en la mira como supuestos homicida. Sino que son presuntos implicados en el robo del auto utilizado por los asesinos para llegar y luego escapar de la escena del crimen. En ese marco, al menos uno de los apresados, de 21 años, será llevado esta tarde a una audiencia imputativa en la que será acusado por el robo.
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El auto utilizado por los homicidas de Trasante es un Peugeot 308 blanco fuer robado en una violenta entradera. El hecho ocurrió cuatro días antes del crimen en una casa de Juan XXIII al 6600, en el extremo sudoeste de la ciudad de Rosario. Según el dueño del vehículo el robo se concretó por tres muchachos muy jóvenes.
El mortal ataque a Trasante sigue cubierto de misterio y la única hipótesis descartada de plano es la de un robo
En tanto, los fiscales de Homicidios y de la Agencia de Delitos Complejos que actúan en la pesquisa solicitaron la detención de tres jóvenes. Uno de ellos, Maximiliano S., de 21 años, fue detenido el viernes en la zona de Maradona y Rouillón, y hoy será imputado. Sobre los otros dos involucrados, ubicados por la policía el sábado, los fiscales utilizarán el día que les queda de plazo para resolver si los presentan frente a un juez.
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Pasamanos
Según establecieron los investigadores los tres detenidos —uno de ellos un adolescente de 16 años que prestó declaración en compañía de su madre— sólo robaron el auto. Y se lo vendieron a otras personas o a los que terminaron usándolo para concretar el crimen. Incluso circulaba al respecto una versión que indicaba que a alguno le habrían hecho un ofrecimiento de mucho dinero para matar a alguien. Sin decirles de quién se trataba, pero los ladrones no lo aceptaron.
Las distintas cámaras que captaron a los autores del homicidio muestran que éstos aparecen caminando y se van caminando del lugar en un lapso de seis minutos.
Sin motivos
El mortal ataque a Trasante sigue cubierto de misterio y la única hipótesis descartada de plano es la de un robo. Hasta anoche los fiscales no tenían identificada una motivación de los homicidas salvo que se presentaron a la casa exclusivamente a matarlo.
Desde la familia remarcan que ninguno de sus miembros tenía conflictos con nadie y que todos atravesaban momentos sin problemas en sus vidas. Todos ofrecieron las claves de sus redes sociales y los teléfonos para ser analizado en busca de algún indicio que la familia no tiene, indica La Capital.