El subsecretario de Seguridad preventiva de la provincia de Santa Fe, Diego Llumá, afirmó que en la previa del amistoso del sábado pasado de Rosario Central ante Belgrano, las autoridades del club canalla incurrieron en “incumplimiento de las normas y protocolos sanitarios establecidos por Nación y la provincia de Santa Fe para la regulación de la vuelta del fútbol”.
Según detalló el funcionario a Mañana OH! “la lista tenía 300 personas e incluía a empleados del club, gente de mantenimiento y limpieza, jugadores y cuerpo técnico. El listado contravenía todos los protocolos (Nación, AFA y Provincia) lo que obligó a un arduo trabajo para identificar por lo menos a 4 barrabravas de alcanza pelotas y gente de seguridad en la misma situación”.
Al momento en el que llegaron los inspectores municipales había 50 personas "haciendo cola para ingresar, en tanto, el club abrió las puertas antes de las 8.30 de la mañana y cuando comenzaron las inspecciones ya había más de 10 autos estacionados en el playón", señaló Llumá en diálogo con Marcelo Garrido, quien indicó que, producto del operativo tres personas fueron detenidas.
“Tanto para las autoridades municipales y para la policía fue a medias una sorpresa, porque se estuvo batallando desde el viernes a la tarde con la lista de ingreso. El club hace muy mal en cubrir las irregularidades, los hechos son los hechos e intervienen dos fiscales: uno covid para lo que pasó adentro y otro para la tira de pirotecnia en los alrededores del estadio por parte de barras” aseguró Llumá.
En tanto, desde Central afirmaron que durante el amistoso no se cometió “falta” alguna. “El club no incumplió con los protocolos sanitarios”, aseguró Ricardo Carloni sobre lo ocurrido en la antesala del partido de entrenamiento.
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