A través del Decreto 408/2021, publicado este miércoles en el Boletín Oficial, el Gobierno oficializó la suspensión de la exportación de un conjunto de cortes de carne, entre los que se incluye el asado, vacío y matambre, entre otros, hasta el 31 de diciembre, en el marco de un Plan Ganadero que tiene como objetivo "bajar los precios".
Para el presidente de la Sociedad Rural de Santa Fe, Ignacio Mántaras, la medida ratificada por Nación solo sirvió “para demostrar su fracaso”, ya que el único precio que bajó fue el de la “vaca de descarte” que tiene como principal destino el mercado chino y que no tiene grandes alcances en la mesa de los argentinos. En contrapartida, el ternero y el novillito, principal consumo nacional, aumentó un seis por ciento.
“Las exportaciones siguen cerradas, solo se liberaron parcialmente y vamos a un sistema de cupos. Mientras en el 2020 se exportaron 900 mil toneladas, este año el Gobierno pretende que sea la mitad y que el remanente vaya al mercado interno para que bajen los precios”, describió Mántaras a Sin Mordaza TV.
Sin embargo, para el presidente de la Sociedad Rural de Santa Fe, los precios en las góndolas no bajarán si el Gobierno no ingenia alguna medida que apunte a reducir la presión impositiva, como la eximición del IVA al consumidor.
“La carne que prohíbe exportar el Gobierno implicaría solo un 10 por ciento de lo que se consume en Argentina, donde se inyectarían 100 mil toneladas, un número ínfimo y destinado solo al conurbano. Acá no se está cuidando la mesa de los argentinos, sino la carne a precios populares solo para Buenos Aires por motivos netamente electorales. La carne barata a Santa Fe nunca va a llegar, ni tampoco al interior del país. Esta es una medida exclusivamente electoral que pega a toda la cadena productiva”, aseveró.
“Si uno quiere ir a mayor producción -continuó- primero se necesita rentabilidad y previsibilidad, cerrando exportaciones no es el camino. El modo de gestionar de Alberto Fernández es uno de pandemia, donde cada 15 días no sabés qué puede cambiar. Si bien la carne aumentó más de la inflación promedio, creemos que el principal problema no es que está cara, sino que los salarios están bajos”, agregó.