Un colectivo interurbano que circulaba por la ruta nacional número 11, a la altura del km 452, no superó el control de alcoholemia, por lo que sus pasajeros fueron obligados a descender del vehículo y debieron pasar la noche en un hotel de la localidad de Sauce Viejo.
El coche, que se dirigía a la ciudad de Rosario, fue detenido por un operativo policial para realizar un control de rutina. Para sorpresa de los 38 viajeros, el recorrido no pudo continuar al detectar que el resultado del test en el chofer había arrojado alcohol en sangre.
Según informaron fuentes policiales, luego que el conductor soplara el alcoholímetro, el aparato saltó de 0 a 0,33 g/l, lo que califica cómo alcoholemia positiva sancionable a nivel profesional.
Labrada la multa, los integrantes del coche debieron dormir en un reconocido hotel de la ciudad de Sauce Viejo a la espera de un chofer responsable para continuar el recorrido.