Desde hace muchos años que hay estudios que sostienen sobre la existencia de una brecha en cuánto a la cantidad de orgasmos entre las mujeres y los hombres, declarando las primeras que tienen significantemente menos "momentos de clímax" que los segundos.
No obstante, este dato provocó el aumento de estudios en la materia para conocer mejor el por qué.
Según una investigación publicada a principios de año, los investigadores exploraron qué factores pueden estar relacionados con los orgasmos más consistentes en una muestra de 1.239 mujeres. Los científicos estaban particularmente interesados en el papel de la estimulación directa del clítoris y de ciertos movimientos corporales que suelen ocurrir durante las relaciones sexuales vaginales.
Los hallazgos de los investigadores sugirieron que las mujeres experimentaron orgasmos más frecuentes durante las relaciones sexuales vaginales cuando incorporaron estimulación directa del clítoris, independientemente de si comunicaron o no movimiento corporal o inmovilización corporal.
Sin embargo, el movimiento corporal "de ida y vuelta", a diferencia de la inmovilización corporal, también se asoció con una mayor frecuencia de orgasmos durante las relaciones sexuales vaginales, incluso sin estimulación simultánea del clítoris directo.
Mujeres VS hombres en cantidad de orgasmos: la respuesta a la brecha
A partir de la investigación publicada este año, surgieron algunas hipótesis de las razones de la existencia de esta diferencia entre hombres y mujeres. Concretamente fueron dos las más avaladas.
- Relaciones sexuales, ¿con el orgasmo como principal objetivo?
La primera teoría radicó en pensar si alcanzar el orgasmo era la meta principal en la relación. Y ahí surgió como un factor de discusión el hecho de si la ansiedad por tener un orgasmo era buena o mala a la hora de realmente conseguirlo. Muchas veces se piensa que obsesionarse con tener un orgasmo puede ir en contra de lograr ese objetivo, suponiendo una presión extra y evita que las mujeres se relajen lo suficiente como para disfrutar la experiencia sexual.
No obstante, varias nuevas investigaciones sugieren que la tendencia de las mujeres a devaluar su placer sexual, particularmente con una pareja masculina, es "contraproducente a la hora de alcanzar el orgasmo".
Los investigadores descubrieron que las mujeres que informaron que tener un orgasmo sí era una meta que tenían en mente cuando tenían relaciones sexuales, eran más propensas a comunicar que habían tenido un orgasmo en su encuentro sexual más reciente.
Otra variable estudiada es la del fingimiento de los orgasmos. Usando una muestra de casi 1.000 mujeres jóvenes, los autores preguntaron no sólo si las mujeres fingieron un orgasmo, sino sobre su motivación para hacerlo. Específicamente, estaban interesados en razones centradas en la pareja (es decir, fingir en beneficio de su pareja) y por razones auto-enfocadas (es decir, fingir el disfrute como una forma de elevar potencialmente la excitación sexual de las mujeres).
- Orgasmos no siempre placenteros
Siempre asumimos que los orgasmos son experiencias positivas y placenteras, aunque nuevas investigaciones de la Universidad de Michigan (Estados Unidos) sugieren que puede haber algunas experiencias negativas en tener un orgasmo.
Algunas encuestadas declararon que habían tenido un orgasmo desagradable o malo en situaciones en las que habían tenido sexo no deseado, con su pareja o con un extraño, o tras sentirse presionadas para tener un orgasmo.
Cuando los orgasmos ocurrieron en estas circunstancias, las participantes a menudo describían el orgasmo como menos agradable e incluso incómodo, agregando que sus orgasmos tuvieron impactos negativos en sus relaciones, en su sexualidad e incluso en su salud psicológica.
En resumen, los orgasmos sólo eran agradables y placenteros si ocurrían durante un sexo consensuado que fuera buscado con entusiasmo y libre de cualquier presión o coacción.
Día Internacional del Orgasmo Femenino: ¿por qué se celebra cada 8 de agosto?
Todos los 8 de agosto se conmemora el Día Internacional del Orgasmo Femenino. El objetivo de la jornada es crear conciencia sobre la sexualidad femenina y el derecho al placer de las mujeres, ya que aún existen muchos tabúes y miedos en torno a la expresión del deseo sexual por parte del género femenino.
La fecha tiene su origen en Brasil en el año 2006, cuando el concejal de Esperantina, José Arimateia Dantas Lacerda, se interesó por un estudio llevado a cabo en la Universidad Federal de Piauí. Este concluía en que el 28% de las mujeres de esa región no eran capaces de llegar al orgasmo. El concejal consideró que dicho estudio demostraba un problema grave de salud pública y, por ello, decidió impulsar una ordenanza que impulsara el placer de las mujeres. La idea fue y es la de fomentar el derecho de "exteriorizar el deseo y materializarlo, equiparando fuerzas con la población masculina". Con el pasar de los años, la fecha se exportó al resto del mundo.
Fuente: Ambito