“Luego de un profundo discernimiento espiritual, en diálogo conmigo y en consulta con otras personas de gran confianza, ha llegado a la conclusión, en conciencia, delante de Dios de no recibir la ordenación episcopal”, puntualizó el arzobispo rosarino.
Y agregó: “Por tanto, ha solicitado al Santo Padre Francisco la dispensa de su nombramiento, quien se la ha concedido”.