La desesperación del socialismo por desviar la atención del tema de los fiscales corruptos en el Ministerio Público de la Acusación (el MPA) es grosera, ridícula, finalmente risueña y da un poquitín de repulsa (asquete).
Pongamos las cosas como son: es un invento de Superti, ministro de Binner en quien Binner confiaba, se dio vuelta y dejó que hiciese todo como se le antojaba.
Intentan mostrar (y usan a periodistas alcagüetes para decirlo) que los votó el peronismo en la Legislatura. Olvidan decir que los propuso el Ejecutivo, esto es: Bonfatti y Lifschitz.
No hay ni un fiscal que no lleve la firma de uno de los dos gobernadores como proponentes y eso es lo bueno: Ni Bonfatti ni Lifschitz pueden alegar inocencia en pliegos que se presentan con su firma.
Si son corruptos son co responsables de haberlos propuesto y si alguno lo propuso el peronismo lo que demuestra es que ellos aceptaron esos pliegos. ¿Qué pacto es ese…? Hoy no pueden decir, ni Lamberto ni Pullaro, que no sabían de qué se trataba. Si pactaropn son corruptos desde entonces y ahora, además, cobardes
Perotti está fuera de los hechos de corrupción de esos fiscales, los policías cómplices y los diputados y otros funcionarios que están en el mismo robo a la sociedad y robo al Estado.
No es que Perotti no sepa de qué se trata, sabe porque la información la posee, como la poseemos todos, pero sabe mas, sabe que es un negocio sucio del socialismo y ellos deben dar la cara, no periodistas chantas que suben videítos o escriben columnas semana tras semana sin mencionar el tema. El tema es la corrupción de los fiscales en tiempo del socialismo. Chicos, el último tonto murió en la Batalla de Pavón.
El santafesino