La Corte Suprema de Justicia provincial confirmó que seis policías cometieron el delito de torturas contra un joven luego de una detención arbitraria ocurrida el 29 de junio de 2013 en Firmat. Cabe destacar, que esta decisión del máximo órgano judicial provincial, retrotae la decisón de un tribunal de segunda instancia de Rosario donde los camaristas Javier Beltramone y José Luis Mascali (con el voto en disidencia de Georgina Depetris) revocaron la condena previa.
Lo cierto es que con un llamado de atención para los magistrados, la Corte resolvió convocar a un nuevo tribunal para que dicte resolución y entendió que la decisión tomada no tuvo sustento en las pruebas del caso, contó el abogado querellante Adrián Ruiz.
El 29 de junio de 2013, cerca de las 15, los policías Matías Darío Busto y Walter Gabriel Aguiar vieron a A.M. en bicicleta. El chico iba junto a su novia y los policías lo demoraron por averiguación de antecedentes, según la reconstrucción.
Lo llevaron a la comisaría 13° de Firmat y de allí al patio de la dependencia, donde fue golpeado y amenazado. Según la acusación, la víctima fue desnudada y con una manguera lo ahogaron hasta generarle el vómito. El joven contó que fue picaneado con un cable atado a un palo de escoba. Dijo que le sacaron fotos y lo amenazaron con empalarlo. Le aseguraban que iba a aparecer muerto en un descampado con un tiro en la cabeza simulando un suicidio. Querían saber quién robaba las lápidas del cementerio y quién las reducía.
En un momento la víctima logró empujar a uno de los policías que lo rodeaban, correr y saltar el tapial. Los uniformados dijeron que se había fugado y lo buscaron pero el joven fue ayudado por algunos vecinos que luego declararon en el caso.
Se inició una investigación y el chico reconoció a los uniformados que participaron en el hecho quienes terminaron condenados por un tribunal de Melincué.
Juan José Zanel, Walter Gabriel Aguiar, Matías Darío Bustos, Alejandro Darío Copetti fueron condenados por apremios ilegales agravados a la pena de 3 años y 3 meses de prisión e inhabilitación especial por 6 años. Mientras que José Alberto Sotelo fue condenado a 3 años y 6 meses de prisión efectiva más una inhabilitación especial por 7 años y el comisario Edgardo Raúl Ale fue sancionado por 4 años de prisión efectiva y 8 años de inhabilitación especial.