*Ana Copes, Pablo Cardinale, Andrés Mathurín, Daniela Muttis y Sergio Bendahan.
El viernes 10 de diciembre se cumplen 38 años de la restauración de la democracia en la República Argentina.
Lamentamos profundamente que el gobierno nacional, en lugar de convocar a todo el pueblo argentino, sin distinción de banderías, haya preferido celebrar el acontecimiento en un acto partidario, perdiéndose así una gran oportunidad de unión y conciliación entre los argentinos.
Sin dudas, hace 38 años la República Argentina ingresó en una etapa caracterizada por la democrática elección de autoridades, con elecciones libres y sin que se hayan producido situaciones que puedan enturbiar la libre decisión ciudadana.
En este ínterin, la responsabilidad del gobierno correspondió durante ocho años a la Unión Cívica Radical, durante veintiséis años al peronismo y durante cuatro años a la coalición Cambiemos.
En tan largo período, podemos concluir que se respetó la democracia, pero, no se cumplió el mandato constitucional de tener un régimen representativo, republicano y federal.
Los fines establecidos en nuestro preámbulo, aún están incumplidos:
- a) Afianzar la Justicia, no se ha logrado en 38 años. Está en dudas la independencia y capacidad del Poder Judicial para asegurar a los ciudadanos un sistema confiable e indubitado para resolver los conflictos:
- b) Consolidar la paz interior, otro objetivo incumplido, conforme surge de las rebeliones de pueblos supuestamente "mapuches" que aterrorizan el sur del país o el terrorismo de origen narco que vemos en la ciudad de Rosario y en el conurbano bonaerense y que se va extendiendo a otras regiones;
- c) Constituir la unión nacional, basta ver la grieta entre las distintas facciones políticas y grupos del país e incluso el propio acto faccioso de la celebración de los 38 años de democracia, para concluir que está lejos de cumplirse;
- d) Proveer a la defensa común, sin dudas el país se encuentra inerme ante el crecimiento de carteles del narcotráfico, con fuerzas armadas desmanteladas, por lo que debemos aceptar que no se ha cumplido;
- e) Promover el bienestar general, con un nivel de pobreza rondando el 50% de la población y veinte millones de ciudadanos asistidos por subsidios del Estado por carecer de medios que le permitan asegurar su propia subsistencia, nos encontramos ante un nuevo fracaso.
Deseamos que estos 38 años sean un punto para que entre todos podamos encontrar un norte común que nos permita no solo tener democracia, sino tener una verdadera República, con división de Poderes y un sistema político que más allá de las diferencias ideológicas que existan, permita reconocer en todos el mismo objetivo de lograr el bien común.
