"Los milagros existen", relató con lágrimas en los ojos el médico cirujano Roberto Byrne, quien el 21 de julio pasado trasladó a su madre desde Carlos Casares hasta el Hospital San Juan de Dios de La Plata, luego de contagiarse de coronavirus.
El caso de Mercedes Barrera sorprendió a propios y extraños en Buenos Aires. Con 80 años, diabetes, Epoc, hipertensión y secuelas de poliomielitis, recibió el alta este jueves, tras permanecer varias semanas internada.
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"Pensaba que no la iba a ver nunca más y acá estamos, gracias al enorme esfuerzo de todo el personal de la salud pública, mi mamá de 80 años y varias enfermedades de base obtuvo el alta", sostuvo su hijo Roberto en diálogo con El Editor Platense.
Por si fuera poco, la del COVID-19 Es la segunda pandemia que supera la mujer. Cuando solo tenía ocho años, fue tratada por un cuadro de poliomielitis en el Hospital de Niños de La Plata, donde requirió de varias operaciones para volver a caminar.
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Además de las secuelas de esa enfermedad, la mujer aun sufre de neumonía bilateral, dibates severa, Epoc y es hipertensa. Por está cuestión, su hijo Roberto describió a esta recuperación como un milagro.
“Es una mujer de mucha garra y muchísima fuerza. Nunca la escuché quejarse ni estar acomplejada. Realmente admirable, de una entereza única", dijo emocionado el hombre.