La pobreza en Argentina se ubicó en el 42% en el segundo semestre de 2020 e implica una suba de más de un punto con respecto al 40,9% de los seis meses anteriores. Sin embargo, en el Gran Rosario hubo un descenso del 41,8% al 38,3% en el mismo lapso, mientras que en el Gran Santa Fe el disminución fue de casi tres puntos (2,8%), en tanto pasó del 42,6% al 39,8%.
Los datos surgen del informe que publicó este miércoles el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) miden el impacto de la pandemia en la economía nacional, ya golpeada por la crisis de los últimos años. En el caso de Santa Fe, las mediciones fueron realizadas en base a los dos grandes conglomerados de la provincia.
En el caso de la indigencia (quienes no llegan a cubrir la canasta de alimentos), llegó al 10,5% en el país y se mantuvo con respecto al primer semestre de este año. En cambio, en el Gran Rosario bajó de 5,9 por ciento, posicionándose en un 7,4%, mientras que en el Gran Santa Fe la disminución fue de un 1,8%, alcanzando el 9,1 por ciento de la población.
Mientras el Gran Rosario cuenta con 506 mil pobres y 98 mil indigentes, el Gran Santa Fe posee más de 200 mil personas en situación de pobreza y 48 mil individuos que no alcanzan a satisfacer un umbral mínimo de necesidades energéticas y proteicas, respectivamente.
Indicadores nacionales
La pobreza llegó al 42% al término del segundo semestre del 2020, 6,5 puntos porcentuales por encima del 35,5% de igual período de 2019, informó hoy el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Además, el Índice de indigencia, que comprende a las personas cuyos ingresos no alcanzan para comprar el mínimo de comida para la subsistencia, se ubicó en el 10,5%, contra el 8% del semestre julio-diciembre de 2019.
Entre ambas mediciones, el Producto Bruto Interno (PBI), cayó un 9,9 % producto de las restricciones que se aplicaron para evitar la propagación de la Covid 19, al tiempo que la inflación fue de 36,1%.
Al cierre del primer semestre de 2020, el índice de pobreza se había ubicado en 40,9%, lo que significó un incremento de 5,5 puntos porcentuales respecto al 35,4% de igual período de 2019. En tanto, el Índice de Indigencia ascendió al 10,5% al término del primer semestre, contra el 7,7% de enero-junio del año pasado.
De esta forma, con respecto al primer semestre de 2020, al cierre del segundo semestre se registró un aumento en la cantidad de personas en situación de pobreza de 1,1 puntos porcentual, en tanto la indigencia se mantuvo en el mismo valor para el conjunto de la población cubierta por la encuesta.
La Canasta Básica Total aumentó 39,1% al cierre del año pasado, debido a que una pareja con dos hijos necesitó percibir ingresos por $ 54.207 para cubrir sus necesidades, mientras que la Canasta Alimentaria subió 45,5%, con una necesidad de ingresos de $22.680 para el mismo grupo familiar.
De cara a estos aumentos en los precios de alimentos y servicios, durante el año pasado, los salarios de los trabajadores privados se incrementaron 34,4%, los haberes del sector público, 26,8% y los empleados “en negro”, 39%, según la medición del Indec.