El Gobierno de Santa Fe autorizaría hoy el trabajo de hasta diez albañiles en obras privadas para el interior de la provincia. Los dos grandes aglomerados, la capital y Rosario, estarían exceptuados de la medida y continuarían con la habilitación de hasta cinco operarios.
La norma que permitiría la incorporación del doble de los trabajadores de la construcción en obras privadas y domiciliarias dentro de distintas localidades del interior santafesino, es consecuencia de las buenas proyecciones en el control de la pandemia. Si bien los casos de COVID-19 continúan, aunque leve, en ascenso, la mayoría de ellos han sido registrado, en los últimos días, solo en la ciudad de Rosario.
En la actualidad, el Ejecutivo exceptuó solo a un reducido número de obreros en los trabajos de construcción a fin de garantizar el cumplimiento de los protocolos sanitarios bajo las exigencias del aislamiento preventivo, social y obligatorio. Sin embargo, ahora, la cantidad de habilitaciones podría cambiar.
Hasta el momento, el documento oficial que tendría su modificación en el día de hoy determina: "Exceptúase del cumplimiento del aislamiento social, preventivo y obligatorio y de la prohibición de circular al personal afectado a la realización de obras privadas, que se realicen con no más de cinco trabajadores, profesionales o contratistas de distintos oficios desarrollando tareas simultáneamente en el mismo lugar, y siempre que los trabajos no impliquen ingresar a viviendas con residentes, locales o establecimientos en funcionamiento".
Se prevé que en las próximas horas, la Casa Gris hará efectiva la resolución de la medida que involucrará un guiño para gran parte del territorio provincial.