A partir de un insólito error humano, Kirguistán perdió mil vacunas Sputnik V luego de que se cortara la cadena de frío correspondiente para reservar las dosis contra el coronavirus.
Según trascendidos, la causa del desastre fue que un trabajador de mantenimiento desenchufó la heladera con las vacunas para conectar y cargar su teléfono celular.
El país asiático había adquirido 20 mil dosis y tuvo que desechar mil de ellas. El hecho ocurrió en abril en una clínica pública de Biskek, pero recién trascendió a nivel mundial esta semana.
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"Si la culpa es de uno de los empleados, de la señora de la limpieza o de otra persona, la clínica tendrá que responder económicamente", señaló el ministro de Salud, Alimkadyr Beyshenaliyev.
El funcionario ya recibió críticas el mes pasado por promocionar una planta tóxica para los seres humanos, como una supuesta cura para el coronavirus.
Kirguistán transita actualmente una tercera ola de Covid-19 y registra más de 100.000 casos y 1.735 muertes, con una población de 6,5 millones de personas.