El senador peronista por el departamento San Lorenzo, Armando Traferri, informó este jueves que pedirá ser querellante en la causa por presunta inteligencia ilegal que tiene entre las personas sospechadas al exministro de Seguridad Marcelo Sain.
Según sostuvo, es porque la suspendida directora de Inteligencia del Organismo de Investigaciones (OI) Débora Cotichini le envió un audio –extraído de una investigación– de una conversación privada del legislador a Sain, cuando éste cumplía una función en el Poder Ejecutivo. Además, dijo que ampliará la denuncia contra los fiscales de Rosario Luis Schiappa Pietra y Matías Edery.
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El pedido para constituirse en querellante que adelantó Traferri se debe a la investigación por la que fue imputada la suspendida funcionaria de Inteligencia del Organismo de Investigaciones. Dentro de la investigación llevada adelante por la auditora del Ministerio Público de la Acusación (MPA) María Cecilia Vranicich se desprenden órdenes vía Whatsapp a subordinados para que le manden material que se encuentra judicializado para enviárselo a Sain, por entonces ya ministro de Seguridad.
Puntualmente, en la acusación formulada a Cotichini –cuando fue imputada por incumplimiento en los deberes de funcionario público– se ventilaron conversaciones que ella mantuvo con subordinados, a quienes les solicitó en más de una oportunidad audios, documentos y recolección de información para el ministro de Seguridad, al que llegó a mencionar como “jefe” en esos chats con los empleados. Cabe recordar que en ese momento Sain estaba de licencia como director del Organismo de Investigaciones, por lo que no debía acceder a dicha información que en algunos casos eran de la esfera privada de personas bajo investigación.
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Una de las conversaciones que figura en la causa que mandó Cotichini a Sain es una conversación telefónica que mantuvo Traferri con un colaborador de San Lorenzo. De hecho, la auditora del MPA aseveró que ese diálogo no revestía “interés persecutorio” en la investigación por la que se había intervenido el teléfono del asesor que habló con el senador.
En ese marco, el legislador sanlorencino ayer aseguró que fue “víctima de espionaje ilegal” y adelantó que pedirá ser querellante en la causa que ya tiene bajo esa figura al ex ministro de Seguridad Maximiliano Pullaro y al Estado santafesino a través de la Fiscalía de Estado.