Como si fuera una escena del film "La Terminal", en donde Tom Hanks queda varado en un aeropuerto, pero más trágica, porque ocurre en el medio del desierto, bajo los rayos del sol.
Catriel Aiello, es un músico argentino de 38 años oriundo del partido bonaerense de Vicente López, que estuvo varado durante varios días en la frontera entre Perú y Chile porque ninguno de los dos países aceptó recibirlo en su territorio.
Tiempo después puso ingresar a Chile y allí sobrevivió los más de 7 meses de pandemia hasta que pudo volver a ingresar a Argentina, su país natal.
Una odisea. Entre Chile, Perú y Argentina
En diálogo con Hugo Isaak, por Cadena OH!, en el programa Todo al Mediodía, Catriel dio algunos detalles de esta historia que ya se expandió rápidamente por redes sociales.
"En este momento estoy en Mendoza. Llegué a Chile el día que estalló la pandemia, justo yo estaba en la frontera entre Perú y Chile. Me habían robado en Ecuador el pasaporte y me convertí prácticamente en un criminal, porque así me trataron. Me rompieron una camisa, pero el maltrato era más verbal y psicológico. Uno puede entender que la burocracia, en el medio de una pandemia y sin pasaporte, no te deje salir del lugar. Lo que no se puede comprender es que te corten el agua, que le digan a las personas que no te ayuden porque los iban a despedir", contó en primer término.
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Posteriormente, detalló: "Luego entré a Chile y allí quedé varado toda la pandemia. Tuve varias detenciones, en una me expulsaron de Chile, y en otra me pusieron una restricción. Primero me decían que me vaya y después me decían que no podía irme. Cuando quise irme, cruzamos con un venezolano dos fronteras, ilegalmente, en plena pandemia. Caminamos 75 km bajo la nieve, y cuando solo nos faltaban 3 km para llegar a argentina nos encontró un camión de gendarme que nos llevó hasta la frontera. Allí nos trataron bien y nos dieron comida, pero nos dijeron que no podíamos pasar".
Increíblemente, a los pocos metros de poder terminar con la odisea y llegar a Argentina, el destino le jugó una mala pasada a Catriel y a su compañero.
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"Yo ahí les conté a los gendarmes que, en Chile, uno de los carabineros me ahorcó y casi me mató. Cuando les dije eso me dijeron que por a ley no me podían dejar entrar a mi país. Luego volví a Chile empecé a conectar con distintas personas, y ahí me crucé con gente buena, que me acercó a la prensa y todo se solucionó", relató en diálogo con Cadena OH!.
Por último, el argentino aseguró que "todo fue parte de una aventura, para mi las fronteras y los países no existen. Ya entré a la Argentina y cuando pueda volveré a Chile".
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